Las explosiones son un riesgo en la industria agroalimentaria, aunque se dan con poca frecuencia, cuando suceden tienen consecuencias catastróficas. Es necesaria la identificación y clasificación en estas zonas de riesgo. Las instalaciones donde se manejen sustancias inflamables o combustibles son susceptibles de tener riesgo de formación de atmósferas explosivas ATEX. Harineras, fábricas de pienso, descascaradoras de frutos secos, deshidratadoras, almacén de líquidos y gases inflamables, etc. Son zonas y actividades con riesgo de formación de atmósferas explosivas.
Según la Directiva 2014/34/UE, última revisión de la Directiva ATEX, define Atmósfera Explosiva como “la mezcla con el aire, en condiciones atmosféricas, de sustancias inflamables en forma de gases, vapores, nieblas o polvos, en la que, tras una ignición, la combustión se propaga a la totalidad de la mezcla no quemada”. Y Atmósfera Potencialmente Explosiva como “una atmósfera que puede convertirse en explosiva debido a circunstancias locales y de funcionamiento”. Según lo dispuesto en el R.D. 681/2003 sobre la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores expuestos a los riesgos derivados de la formación de atmósferas explosivas en el lugar de trabajo, la empresa debe elaborar y mantener actualizado un “Documento de protección contra explosiones” (DPCE), donde se identifiquen y evalúen las zonas clasificadas ATEX, así como las medidas técnicas y organizativas de protección adoptadas, para prevenir, mitigar y proteger contra las explosiones. Independientemente de su obligación legal, el estudio y la clasificación de zonas ATEX en nuestro entorno laboral y la implantación de las medidas de protección que se desprendan del DPCE, es indispensable para mejorar las condiciones de seguridad en el trabajo.
La Directiva ATEX 2014/34/UE establece las disposiciones a tomar por los EEMM para los aparatos y sistemas de protección diseñados para ser empleados en áreas con riesgo de explosión. Por otra parte, la Directiva ATEX 1999/92/CE establece las disposiciones mínimas para la mejora de la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores expuestos a los riesgos derivados de Atmósferas Explosivas.